lunes, 18 de abril de 2016

COLEGIO INMACULADA CONCEPCIÓN DE SICUANI



Dentro de la historia se registra un acontecimiento trascendental e importante para el desarrollo integral de la provincia de Canchis, el cual es la creación y fundación del Colegio Nacional Inmaculada Concepción de Sicuani, obra que tuvo impacto en la educación regional y nacional por considerarse un hito en la conquista de la mujer por sus derechos; sus gestores y la gente visionaria de Canchis, con la inteligencia que les caracteriza otorgaron sin demora ni restricciones a la población femenina de aquel entonces el espacio adecuado para su educación y formación integral y su plena inserción en la vida social, política y económica del país.

El 23 de diciembre del año 1947, visita la ciudad de Sicuani, el Monseñor Santiago Hermoza, Arzobispo del Cusco, quien dentro de su política y programa de trabajo de la arquidiócesis a su cargo, tenía como meta crear escuelas y colegios religiosos a través de la Congregación Nazarenas Carmelitas de Cusco; en aquella visita en reunión con la población manifiesto su deseo de crear un colegio para señoritas, lo cual fue recibido con gran entusiasmo por los presentes, para cuyo efecto y con gran desprendimiento ofreció su casa para este propósito la señora Angélica Becerra de Menéndez; después de múltiples e inmediatas gestiones, al año siguiente, vale decir el 28 de abril de 1948, con la autorización Ministerial Nº 1559 del 23 de abril de 1948 se dio inicio contando solamente con la sección primaria y con el nombre de “Angélica Becerra”, posteriormente y dispuesto por el Ministerio  de Educación, se cambió por el de Inmaculada Concepción.

El año de 1951, se crea el primer año de educación secundaria en merito a la Resolución Ministerial Nº 1440 del 03 de abril de 1949, de igual forma continuando las gestiones por sus benefactores, directivos y contando con el apoyo de Dr. Juan José Tevés, parlamentario de aquel entonces, estando como presidente de la República el General Manuel A. Odria, se logra la nacionalización del colegio con secundaria completa por Resolución Suprema Nº 44 del 07 de marzo de 1956.

El año de 1978, el colegio Inmaculada después de atender durante 30 años con exclusividad a la población estudiantil femenina de Sicuani, la provincia y provincias altas, amplia sus servicios y atención educativa a estudiantes varones, convirtiéndose así en colegio mixto de acuerdo a los programas del Ministerio de Educación. Desde su fundación hasta nuestros días, la labor del Prestigioso Colegio Inmaculada Concepción, es notable y fructífera gracias al trabajo perseverante de sus maestros y directivos de todas las épocas.
  
Dentro de sus gestores, maestras y maestros de antaño podemos destacar la figura de Mons. Santiago Hermoza, Sor. María Presentación de la Providencia, Angélica Becerra de Menéndez, Madre Irma Esther Blanco Guidi, Madre Iris Graciela Calderón Collado, Rosario A. de Tello, Irma Rojas Bravo, Laura Guerra de Terzi, Doris Callo de Dongo, Hna. Elsa Valencia Guzmán, Imelda Rivera Gómez, Alcira Gomes Baca, Carmen Villena de Fernández, entre otros más.

© Escribe: Guido Ancori Cervantes - Publicado 2010

sábado, 16 de abril de 2016

Carta de Albano Quinn Wilson

MIS TREINTA AÑOS EN SICUANI

Albano Quinn Wilson (+) O. Carmelita
Junio del  2009


Con motivo de la celebración de las Bodas de Oro de la Prelatura de Sicuani, quisiera enviar un saludo muy fraterno y cariñoso a todas mis hermanas y hermanos en la fe de las provincias de Chumbivilcas, Espinar, Canas y Canchis. Mi Salud no me permite que vuelva a la altura, así es que no voy a poder estar presente en las celebraciones.

El 06 de junio de este año voy a cumplir 60 años de mi ordenación sacerdotal. He pasado casi la mitad de estos años en la prelatura de Sicuani. Doy gracias a Dios por esos años y especialmente por los años que pase entre ustedes (1970-2000).

Nunca puedo olvidarme de la gente tan buena de las cuatro provincias, tanto en las comunidades campesinas como en los centros urbanos. La gente siempre recibía a su pastor (obispunchis) con tanta alegría, compartiendo lo poco que tienen. Y tan dispuesta a recibir la palabra de Dios. Para mí ha sido motivo de profundizar mi fe y de llevar la Buena Nueva del Señor a mis hermanos y hermanas.

Tuve la gratísima experiencia de participar en la vida de la Iglesia Sur Andina. Vivíamos una verdadera fraternidad eclesial. Los prelados, los misioneros laicos, los religiosos y religiosas y sacerdotes nos sentíamos muy unidos en la búsqueda de servir a nuestros pueblos en el nombre del Señor. Tratábamos de seguir el ejemplo de Jesús y de acoger la orientación de la iglesia de Vaticano II y de Puebla. Pasamos mucho tiempo estudiando y revisando nuestra pastoral. Gracias al Instituto de Pastoral Andina (IPA) pudimos reunirnos y escuchar a especialistas y a otros expertos en las costumbres, la religiosidad y la cultura de nuestro pueblo. Buscamos una iglesia identificada con nuestro pueblo, en su mayoría un pueblo que vive en condiciones infra-humanas y victima de toda clase de injusticias. El Reino de Dios, que comienza en el aquí y ahora, es un Reino de justicia, de fraternidad y de paz. La Iglesia es el comienzo y “la levadura en la masa” en la construcción del Reino de Dios en este mundo.

Para terminar, quisiera recordar al primer pastor de la Iglesia de Sicuani, Mons. Nevin Hayes (1959-1970). El tuvo que retirarse por motivos de salud y falleció el 12 de julio de 1988.

Que Dios bendiga siempre a los hermanos y hermanas, con su Pastor, de la Iglesia de Sicuani para que sea “fermento en la masa” hacia una sociedad más conforme a la Voluntad de Dios, bajo la protección de la Virgen del Carmen, patrona de la Prelatura.          


Publicado por: Guido Ancori Cervantes 2010

miércoles, 6 de abril de 2016

Inca Garcilaso de la Vega: 400 años

400 AÑOS DE LA PUBLICACIÓN DE LOS COMENTARIOS REALES DEL INCA GARCILASO DE LA VEGA

Es muy difícil escribir sobre el proceso de transculturación que sufrió el Perú con la invasión española, aquí una opinión sobre el personaje que trato de explicar ese traumático encuentro de dos mundos. Fueron nostalgias y melancolías que impulsaron a Garcilaso de la Vega a escribir sobre los incas, sus antepasados, de quienes se decían caprichosas historias. El mestizo peruano quiso contestar esas falsedades y se convirtió en el rey de los cronistas.
 
(De Lisboa año MCIX al Perú año 2009)
Del 20 de marzo al 30 de abril del año 2009, en la sagrada ciudad del Cusco, con la batuta de la Municipalidad Provincial y el Instituto Nacional de Cultura, se celebro los 400 años de la publicación y de la luz que pretendió dar al mundo el Inca Garcilaso de la Vega con su obra los “Comentarios Reales”; porque de la fecha en la que fue editada esta obra que describía el lamento de un imperio perdido y la aceptación obligada de una nueva cultura, es necesario voltear la mirada y preguntarnos si después de 400 años hemos logrado la emancipación anhelada por nuestros caudillos que desde esa época se forjaron o si por el contrario seguimos anhelando el imperio perdido y la aceptación ibérica, en un mestizaje negado traducido hoy en día en alienaciones.
Aurelio Miró Quesada S.

Con la obra del Inca Garcilaso nace en realidad la “literatura peruana”, si se le entiende no como continuidad de las creaciones orales indígenas, ni el eco ultramarino de las letras de España, sino como un modo particular de pensar y sentir y de expresarlo en forma escrita. A un tiempo indio y español, incorporado como hombre de su tiempo a los usos literarios de España y a los marcos mentales de Europa, afloran en sus páginas la atracción de su tierra peruana y la nostalgia de Imperio Perdido. Es una nueva visión mestiza, como mestizo es el nombre del Perú y mestizo es el mismo, y por serlo se llama así “a boca llena” y se honra con ello.

El peruanismo del inca Garcilaso, sin embargo no es restringido ni excluyente, sino de integración y de fusión. El mestizo cusqueño sabía perfectamente que a mediados del siglo XVI ya no se podía revivir el Tahuantinsuyo, porque los conquistadores españoles habían arrojado una semilla de la que estaban brotando nuevos frutos en los campos de América. (“fruta nueva del Perú”, llamo precisamente Felipe II a la traducción de León Hebreo). Y sabia también que, a pesar de todas las leyes españolas y mas allá de los actos forzados o de las imitaciones voluntarias, tampoco se podía implantar una artificial Nueva Castilla, sino había surgido algo distinto que, simbólicamente , no tenía un nombre castellano ni quechua, sino se llamaba con un vocablo espontaneo y criollo: el Perú. Extendiéndolo a América, así habrá que entender la singularidad del mundo americano, al que con la frase del Inca Garcilaso “con razón lo llaman Nuevo Mundo, porque lo es en toda cosa”.